happy pride

y lo digo un par de días antes porque cuando uno postea una vez a la semana es mejor prevenir. o séase, que esto no tiene nada que ver con que francia le haya dado por culo a españa en el mundial, sino con que ya mismo hace otra vez no sé cuántos años desde que un grupo de travelos levantara barricadas contra la policía de nueva pork (que no por eso ha dejado de ser de las más homófobas de eeuu, que ya es decir). resulta que allí se han hecho algunos de los muy escasos estudios sobre violencia dentro de parejas no heterosexuales, descubriendo el nada sorprendente hecho de que hay por lo menos tanta como en las otras, pese a que se denuncie menos y a que la policía, cuando atiende las denuncias, se las toma a cachondeo, en el mejor de los casos. y digo en el mejor de los casos porque allí a las fuerzas de seguridad les encanta responder a la violencia con más violencia, sobre todo cuando hay maricas o hispanos o moros o negros de por medio. pero a lo que yo iba es a que no está de más recordar que, ahora que en este país transexuales y maribollos podemos celebrar cosas como la ley de identidad de género o el derecho al divorcio, aún no es lo mismo ni importa lo mismo una mujer hetero maltrada por su pareja o expareja, que cualquier maribollo maltratada por su pareja o expareja. ni será lo mismo ni importará lo mismo por mucho tiempo porque, y bien lo saben las mujeres maltratadas, las cosas de palacio van despacio. y sobre todo porque la muy reciente y aplaudida ley "integral" contra la violencia de género tiene un espectro muy restringido de aplicación: la mujer maltratada heterosexual. sea cual sea su situación de malos tratos, cualquier otra víctima estará por lo menos tan desprotegida legalmente como lo estuvieron siempre las que ahora ampara esta ley. el otro día en taiwan vieron broke back mountain y decidieron dejar claro que donde su ley de protección contra la violencia doméstica hablaba de parejas, se refería a cualquier pareja. eso aquí y ahora sería política ficción, bastante más de lo que lo era el matrimonio hace unos años, y no precisamente porque hollywood no dirija la política nacional. en cualquier caso, y aunque en la selva queda mucho por hacer, es previsible que la manifestación del 28 jota será cada vez un poco menos contra la homofobia y la transfobia legal y cada vez más contra la homofobia y la transfobia en general. lo cual nos situaría, en este país y algunos más, más o menos en la situación del feminismo postsufragista de principios del siglo xx, cuando se alcanzó por primera vez en algunos países la igualdad formal de derechos entre hombres y mujeres heterosexuales. claro que creo que a las lesbianas también les dieron derecho al voto, pero debió de ser así como sin querer. un siglo después podemos decirlo. a ver ahora cuántos siglos hay que esperar una ley integral contra la violencia de cualquier género, o ya puestos, contra cualquier género de violencia. excepto en la cama y previo acuerdo, por supuesto. eso por no hablar ahora de la abolición del matrimonio, que queda feo.